A pesar de ser menor, de texto, la literatura en “microrrelato”, está alcanzando en nuestra sociedad actual el estatus de género literario del siglo XXI.
Se trata de un estilo breve y contundente que causa sorpresa en un lector que ya lo ha visto casi todo en el cine, internet y la televisión. Estas narraciones caben en un correo electrónico, en un mensaje de texto para el móvil, etcétera. La sociedad de este planeta es básicamente visual, conectada, consumista y de economía global, pero aún así el mercado del libro no resulta fácil.
La excusa o realidad es que las obligaciones sociales y familiares impiden que el ciudadano dedique horas a la lectura.
He aquí una de las bondades del “microrrelato”, requiere a lo sumo 4 o 5 minutos de atención y se puede leer en el metro, en la cola del banco, esperando el autobús…
Sus múltiples significados son como los aromas de un perfume, hay que tener buen olfato para detectarlos e identificar qué juego nos propone el escritor, qué mensajes ocultos ha dejado en una trama de aparente simplicidad.
Un género que permite explorar las formas narrativas, es decir, le consiente al escritor experimentar con maneras nuevas de contar la historia, pero al mismo tiempo, demanda un lector inteligente, con cultura general, y proclive al buen humor.
Los ‘microrrelatos’ desprenden una sustancia fascinante, apuñalante, mordisqueante y alucinante, ¡como poco!
Francisco Ponce Carrasco
El microrrelato va a ser el objeto de nuestro tercer y último concurso del año. Como habéis podido leer, Francisco Ponce, el autor de este estupendo artículo os enumera las características y propiedades de este estilo.
A continuación os muestro algunos de los que más me han gustado, así como uno de creación propia.
Animaos, que en en nuestro colegio hay mucho filón narrador.
Hubo una ocasión en la que el Pentágono diseñó un arma tan inteligente que cuando llegó el momento de matar se declaró objetora de conciencia.
LA INCREIBLE HISTORA DEL HOMBRE QUE SE LEVANTÓ UNA MAÑANA Y, AÚN DESPUÉS DE LEER EL PERIÓDICO, SEGUÍA SIENDO FELIZ
-¿Si estuvieras condenado a crecer, cómo te gustaría ser? preguntó Peter Pan a aquel libro de tapas oscuras y título dorado.
-Breve, original, memorable.
A llegar el viernes, los ciudadanos de aquella gran nación, animados por su presidente, gritan:
YES, WEEK END.
ESTABA TAN ABURRIDA QUE NECESITABA LA COMPAÑÍA DE UN MASCULINO, SINGULAR. ENSEGUIDA LA ENCONTRÉ: UN BUEN LIBRO. De Carmen Sánchez (dedicado a mis chicos de 3ºA que tan bien analizan morfológicamente)
